En general, mientras los minutos de la vida se consumen y nuestro tiempo parece una bolsa de minutos ilimitados de la cual no es necesario hacer cuenta, más allá de una vela más en un pastel cada año y algunos cambios fisiológicos en tu incansable cuerpo, son nuestros recuerdos y anécdotas, una radiografía de lo que somos, una verdadera y obviamente mucho más profunda que tu superficial y engañosa imagen en redes sociales, tu hoja de vida y claramente más reveladora que una foto de ti mismo.
Es como una radiografía que ningún experto diferente a ti podría comprender y te da la respuesta a la atragantante pregunta ¿Qué he hecho con mi vida? y depende de cada quien y sus expectativas y pre conceptos una respuesta alentadora o frustrante a tan complejo cuestionamiento. Y en definitiva,
una respuesta que cada día te recuerda, ante tu reflejo, que un día esa bolsa de minutos expirará.
Pues bien, he decidido agregar un reto interesante a mi bolsa de minutos y por eso dejar todas las comodidades de mi país para vivir una experiencia de un año por Oceanía y Asia es y espero que así resulte. Un tiempo extra lleno de la incomodidad de los cambios pero también de la satisfacción de aprender cosas nuevas y salir de la rutina.
Para hacer este viaje posible, son muchas las cosas que son necesarias tener en cuenta: Decidir un destino entre tantas opciones en el mundo; ahorrar el suficiente dinero para evitar morir de terror un día perdido en una ciudad desconocida sin un peso en el bolsillo; los tramites, documentos, pagos, averiguaciones, etc y, claro está, contarle y justificar a todo curioso, porque diablos vas a dejar todas las comodidades que, como no todos en mi país, tengo y que quiero reemplazar por la incomodidad de ser un extranjero gastando sus ahorros a una taza de cambio totalmente desfavorable que implica gastar 4 veces más.
Por ahora, puedo contar que lo principal es justificar la Visa, a través de estudios para que sea posible que te den tanto tiempo. La idea de esta aventura es conocer Australia, Tailandia, Bali y China. Y si es posible de regreso a Colombia saludar algunos amigos en Europa.
Es increíble que con tantas personas que viajan, la información clara sea tan escasa y abunden las agencias que te quieren "asesorar" pero en realidad lo único que les interesa es que compres un curso o un tour ganar su comisión. Te van a decir que todo es muy fácil simplemente porque no les interesa que tus anecdotas y tu vida se llene de momentos especiales, solo quieren tu dinero.
Es como una radiografía que ningún experto diferente a ti podría comprender y te da la respuesta a la atragantante pregunta ¿Qué he hecho con mi vida? y depende de cada quien y sus expectativas y pre conceptos una respuesta alentadora o frustrante a tan complejo cuestionamiento. Y en definitiva,
una respuesta que cada día te recuerda, ante tu reflejo, que un día esa bolsa de minutos expirará.
Pues bien, he decidido agregar un reto interesante a mi bolsa de minutos y por eso dejar todas las comodidades de mi país para vivir una experiencia de un año por Oceanía y Asia es y espero que así resulte. Un tiempo extra lleno de la incomodidad de los cambios pero también de la satisfacción de aprender cosas nuevas y salir de la rutina.
Para hacer este viaje posible, son muchas las cosas que son necesarias tener en cuenta: Decidir un destino entre tantas opciones en el mundo; ahorrar el suficiente dinero para evitar morir de terror un día perdido en una ciudad desconocida sin un peso en el bolsillo; los tramites, documentos, pagos, averiguaciones, etc y, claro está, contarle y justificar a todo curioso, porque diablos vas a dejar todas las comodidades que, como no todos en mi país, tengo y que quiero reemplazar por la incomodidad de ser un extranjero gastando sus ahorros a una taza de cambio totalmente desfavorable que implica gastar 4 veces más.
Por ahora, puedo contar que lo principal es justificar la Visa, a través de estudios para que sea posible que te den tanto tiempo. La idea de esta aventura es conocer Australia, Tailandia, Bali y China. Y si es posible de regreso a Colombia saludar algunos amigos en Europa.
Es increíble que con tantas personas que viajan, la información clara sea tan escasa y abunden las agencias que te quieren "asesorar" pero en realidad lo único que les interesa es que compres un curso o un tour ganar su comisión. Te van a decir que todo es muy fácil simplemente porque no les interesa que tus anecdotas y tu vida se llene de momentos especiales, solo quieren tu dinero.
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